Mendilibar parecía el sargento Hartman de "La Chaqueta Metálica" durante el entrenamiento del jueves. El entrenador del Real Valladolid ha sacado el látigo para que el equipo vuelva a trabajar con intensidad. “No me gustó el entrenamiento de ayer. Todos nos hemos dejado llevar y lo que me importa es que sigamos teniendo ganas de hacer cosas”, se ha autocriticado Mendilibar.
“Empezando por nosotros [el cuerpo técnico], te dejas llevar. Y si te dejas llevar tú, los jugadores también. Cuando has conseguido lo que querías resulta difícil mantener la tensión. Antes corríamos hasta morir en el campo y ahora no apretamos tanto. Hoy hemos estado más centrados en el entrenamiento. A ver si para el partido ante el Castellón estamos más metidos”, ha declarado el entrenador del Real Valladolid en la habitual rueda de prensa de los jueves.
Mendilibar considera que él “ha bajado los brazos” y el equipo hizo lo mismo ante el Cádiz. “Debemos estar al cien por cien. Hay que estar encima del jugador para que tenga tensión y actitud en este momento. Lo que me importa es que tengamos ganas de hacer las cosas, no que fallemos en un control, un tiro o un pase. Ahora debemos centrarnos en conseguir el mayor número de puntos posible”.
Para Mendilibar el Real Valladolid no tiene que “bajar los brazos” porque “sería dar facilidades a unos equipos y perjudicar a otros”. “No sería de buenos profesionales. También es verdad que quedan cinco partidos y es un pequeño porcentaje en toda la temporada. No se nos puede achacar que haya equipos que puedan descender por nuestra culpa”.
El entrenador blanquivioleta cree que el Castellón, el rival del próximo domingo (Castalia, 18,30 horas) tratará de apretar y no dejarles jugar. “Creo que guardarán un poco sus espaldas porque un punto les supone seguir fuera del descenso y, si los de abajo no ganan, aumentar incluso su ventaja”.